Ni en el mejor guión de cine se pudo haber escrito un final como el vivido hoy en la Bombonera. ¿El actor principal?, un hombre que ha avanzado contra viento y marea para ser lo que es hoy: una verdadera leyenda. Esta es la historia de Martín Palermo, quien en su último superclásico, se dio el gusto de anotarle un gol a River Plate en el triunfo de Boca Juniors por 2-0, en un partido válido por la fecha 14 del torneo Clausura Argentino.
Los primeros minutos fueron de tramite parejo, prácticamente sin oportunidades de gol, y en donde la jugada mas polémica llegó al minuto 18. Funes Mori fue derribado dentro del área por Insaurralde y el árbitro Loustau no cobró el penal sobre el jugador de River.
Luego, cuando la visita tenía mayor posesión de balón, y se aproximaba constantemente por intermedio de Lamela y Pavone, llegó su infierno. Minuto 26, Mouche realiza un desborde a la entrada del área "millonaria". Su remate es desviado por un defensa de River y tapado de gran forma por Carrizo, quien mandó el balón al córner. En la jugada siguiente llegó la apertura del marcador. El tiro de esquina fue lanzado por el mismo Mouche, Carrizo sale a cortar el centro y desvía el esférico contra su arco e involuntariamente convierte el autogol que le daba la ventaja a Boca.
El desafortunado gol mermó anímicamente a River y eso lo aprovechó el equipo local. En el 31', el interminable Martín Palermo aprovechó un balón devuelto por Colazo, luego de un tiro libre enviado por Riquelme, y definió de cabeza con la frialdad y precisión que lo caracteriza. Era el 2-0 y la celebración con sus ojos llenos de lágrimas hacían presagiar que era su último regalo a los hinchas "xeneizes".
El segundo tiempo fue dominado por River, quien salió a buscar un posible descuento. Se aproximó al arco de Boca por intermedio de Lamela, y con jugadas aisladas de Pavone, pero sin la eficacia necesaria para doblegar a su rival. La llegada más clara fue por intermedio del ex delantero del Betis de España, quien dejó atrás a Insaurralde y definió por sobre Lucchetti, pero el gol es salvado en la línea por Monzón. Por su parte, Boca intentó vía contragolpes liderados por Riquelme, Palermo y Mouche pero el partido no tuvo una ocasión clara para marcar el tercero.
A los 81', el héroe de la jornada es reemplazado por Lucas Viatri y la Bombonera lo despidió entre aplausos y cánticos. Fue su última aparición en un superclásico y se retiró a lo grande, el mejor final de la pelicula del "loco" Palermo.
*Datos:
- Desde el año 2004 que River Plate no puede derrotar a Boca Juniors en la Bombonera por partidos oficiales.
- Palermo anotó su gol número 18 en 31 clásicos jugados ante River Plate, el primero lo anotó el año 1997
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