La Universidad Católica viajó a Calama para jugar la primera de dos "finales" rumbo al título del campeonato. Cobreloa no perdía en casa desde julio, frente a la Universidad de Chile, y llevaba 4 triunfos consecutivos como local. Y todo comenzó mal para la visita, porque en el primer minuto de partido, Patricio Galaz abrió el marcador y dejó a todos los hinchas cruzados con la cabeza entre las manos.
El equipo de Pizzi tenía más el balón, pero le faltaba profundidad. Los delanteros estaban muy separados de los mediocampistas, y los cruzados comenzaron a utilizar el pelotazo. Nunca dio resultado, por que la defensa loína estuvo bien parada y hacía bien las coberturas. Valenzuela subió muy poco en el primer tiempo, y cuando la UC atacaba, solo habían dos o tres jugadores por delante del balón. Por ende, pocas alternativas para tocar.
El segundo tiempo empezó con los mismos jugadores, pero la Católica presionaba más arriba. El "gato" Silva tuvo que salir por lesión, y Felipe Gutierrez entró en su reemplazo. El jugador nacido en la cantera cruzada fue vital, porque en el 57', encaró por el centro y un defensa local lo derribó dentro del área. Penal claro que el juez Patricio Polic no dudó en cobrar, y el capitán cruzado tampoco lo hizo al lanzar. Mirosevic anotó el 1 a1 que le daba esperanzas a los hinchas cruzados de conseguir el triunfo.
La UC sufría con cada balón aéreo que el "Chucky" González enviaba al área. Esa fue la formula más utilizada por los locales para complicar a su rival. Meneses comenzó a ser factor importante por la derecha, y en el minuto 69, hizo el máximo esfuerzo para llegar a un balón que se iba por línea de fondo y envió un centro que cayó en los pies de Eluchans. El argentino intentó un "globito" al arquero, pero la pelota pegó en el palo. El rebote lo recogió Pratto, quien de cabeza mandó la pelota al fondo del arco. Locura en los hinchas cruzados, porque significaba la vuelta al marcador y el liderato del torneo. Sin embargo, cuando se es hincha de Católica uno sabe que debe sufrir, y esta no fue la excepción.
Tres minutos después, y tras centro de González, Cantero anotó el empate de cabeza. Pizzi no lo podía creer, y los hinchas tampoco. En el 78', se lo perdió Mirosevic y en el 82' Pratto. El técnico cruzado decidió (en una maniobra incomprensible) sustituir a Meneses por Pizarro. Se agotaban todas las formulas y parecía que el empate sería el resultado definitivo. Todo hasta que en el minuto 89, se marcó una falta por la derecha a la entrada del área. Eluchans se encargó de la ejecución, y el argentino la clavó en el ángulo superior izquierdo del portero. Golazo que significaba el triunfo, pero también el liderato del torneo a falta de una fecha.
El pueblo cruzado es feliz y ahora espera el resultado de mañana entre O'Higgins y Colo Colo. Si los albos pierden puntos, los cruzados tendrán la primera opción de quedarse con el campeonato y así conseguir su estrella número 10.
*Mejor jugador de Cobreloa: González
*Mejor jugador de Universidad Católica: Pratto y Ormeño
*Dato: La Universidad Católica nunca ha perdido un partido con el árbitro Patricio Polic.
Milovan Mirosevic lleva 15 penales anotados de forma consecutiva.
La Kato campeón la la la ♪ ♫.... :D
ResponderEliminar